El Salvador: un viaje a través de sus ritmos

La evolución de la música en El Salvador es un testimonio vivo de la riqueza y complejidad de su identidad cultural. Hablamos con Steady Rollin, Carrot, Bunny Island IV y Miguel Campos.

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por:Diana Cristina Pérez Flores, Iliana Melissa Chávez Martínez, Ivana Jeannette Flores Echeverría,  Andrea Michelle Méndez Leiva, Mario Eugenio de Asís Herrera, Edgar Ulises Vega Alfaro / una actividad de la Cátedra de Redacción de Plataformas Digitales impartida por Lic: Miguel Alfonso Martínez Martínez.

La música en El Salvador ha evolucionado con la aparición de nuevos estilos contemporáneos. 

Desde la cumbia hasta géneros como el pop y el rock, la música salvadoreña muestra una diversidad impresionante de géneros, artistas y estilos, reflejando la influencia de distintas corrientes musicales que han llegado al país.

Para Euroinnova Business School. (2024, 8 julio). La música es un medio de comunicación muy influyente, funcionando como medio de comunicación trascendental.

Según la periodista Edith Sánchez (2022, 07 abril).  La música es un lenguaje  universal capaz de despertar emociones y sensaciones únicas. 

“A veces escuchas cantar a alguien en un idioma desconocido, pero logras sentir lo que quiere transmitir, aunque no sepas específicamente qué dice la letra. Lo que sí sabes es que está expresando algo alegre, o triste, o dramático, etc”.

Las plataformas digitales han facilitado la difusión de la música salvadoreña, permitiendo un mayor alcance de oyentes y reconocimiento significativo a nivel nacional como internacional. 

Esto ha llevado a la realización de eventos y festivales en El Salvador, promoviendo la interacción cultural y mostrando la vitalidad de la música del país.

Steady Rollin

La banda fue formada en 2015 en El Salvador por el cantante, guitarrista y empresario Fernando Poma, el bajista Gerardo Pardo y el baterista Benjamín Andrade, inspirados en el sonido de bandas de rock clásico como Led Zeppelin, Rush o The Rolling Stones. 

Según la revista Rolling Stone, «su formato power trío evoca la historia de Cream» y «apunta al legado de Led Zeppelin».

En los últimos años, la agrupación Steady Rollin ha logrado consolidarse en la escena nacional e internacional, ganando miles de adeptos gracias a su fusión de blues, rock y otros géneros que logran como resultado un material experimental de primer nivel.

Con sus éxitos, Steady Rollin ha capturado los corazones y las mentes de las audiencias en su natal El Salvador y en otros países.

A lo largo de su carrera, la banda ha obtenido importantes reconocimientos, entre ellos el Premio del Público El Salvador en los Premios Estela de Guatemala 2018; Mejor video en “Viva la Mañana” (2018 y 2022); y Mejor canción de rock en “Música 503”.

Gerardo Pardo, “Cuando uno crea una composición musical propia lleva un proceso amplio dependiendo de los instrumentos que se utilicen sin embargo si es un cover de una canción ya existente se estudia su aritmética y estructura”.

Hasta hoy, Steady Rollin ha brindado múltiples conciertos en Latinoamérica. ”Fue muy sorprendente ver que en otros países cantaban nuestras canciones”, comenta Fernando Poma en múltiples notas en la web.

Bunny Island 

La historia de la banda salvadoreña Bunny Island es un relato de diversidad, creatividad y amistad, John Robert Cortez, de 20 años; René Oswaldo Henríquez López (Oswy), de 20; Walter Rivera, de 25; y Luis Sánchez, de 26 años.

Empezaron hace algunos años, los artistas venían con la mentalidad de crear una banda que fuera reconocida en el ámbito artístico, fue entonces que se originó a principios del año 2023 la creación de la banda. Es un testimonio de la magia que puede surgir cuando la música une a personas con talento y pasión. 

El nombre Bunny Island se inspira en la diversidad musical de los integrantes de la banda y nace inspirado en la Isla Conejo, que refleja la diversidad y la peculiaridad de los miembros.

La  mayoría de los miembros de Bunny Island son originarios de Santa Tecla, una ciudad en la que la música siempre ha sido un elemento central en la vida de sus habitantes. Fue en ese extraordinario entorno donde los miembros de la banda comenzaron a construir su sueño de formar una agrupación que refleja su amor por la música y su creatividad.

A través de su dedicación y trabajo arduo, Bunny Island ha logrado consolidarse como una de las propuestas más trascendentales y originales de la escena musical salvadoreña. 

Su trayectoria está marcada por la honestidad de sus letras, la energía de sus presentaciones en vivo y la complicidad que han forjado como amigos y compañeros de banda.

Su historia es un recordatorio inspirador de cómo la música, pasión y la amistad pueden dar lugar a algo único y extraordinario. 

Walter Rivera “El proceso creativo de nuestras canciones es muy amplio y nos inspiramos bastante del mundo indie”

Luis Sánchez´: “Nuestras canciones toman inspiración de vivencias ocurridas amores fallidos o distintas situaciones que se nos presentan”

Carrot

La historia inició en 2014 con dos amigos que se conocían desde la infancia: Jorge Cano, guitarrista y vocalista; y Luis Escobar, quien también toca la guitarra.

Desde sus inicios, ambos integrantes compartían no solamente la pasión por la música y los instrumentos sino que también una particularidad: son zurdos.

Pasaron durante algunos años tocando en diferentes escenarios salvadoreños, pero en ese tiempo la visión del dúo se había transformado y querían formar algo más grande, por lo que incorporaron a dos nuevos elementos: Ítalo Audía y Ronnie Rosa.

En 2020 ganaron el premio a Mejor Canción del Año y Mejor Canción alternativa de Música 503, y en 2019, ganaron el premio Artista Revelación, de El Sótano. 

También han sido parte de eventos al lado de artistas como: Jesse Baez, Little Jesus, Sebastián Yatra, Mau y Ricky, Nicky Jam y Gente de Zona.

Miguel Campos

Miguel Campos Music pianista de El Salvador catalogado promotor de YAMAHA EN el Salvador.

La música, como forma de arte y medio de comunicación, desempeña un papel fundamental en la vida de las personas, influyendo en su estado emocional, cultural y social. En El Salvador, la diversidad musical refleja la riqueza cultural del país y conecta a las comunidades a través de experiencias compartidas. A medida que la música contemporánea evoluciona, es esencial reconocer su impacto en la identidad cultural y el bienestar de la sociedad.

Un país donde la música es un reflejo de su historia, cultura, pasión y amor, bandas como, Adhesivo, Miguel Campos Bunny Island destacan como faros de creatividad y expresión artística, iluminando el camino hacia un futuro musical más brillante y enriquecedor. Que su música siga resonando en los corazones de quienes la escuchan, inspirando y recorriendo nuevos horizontes, emociones en cada acorde y verso, y recordándonos la belleza y trascendencia del arte musical en nuestras vidas. 

¡Que la música salvadoreña siga iluminando nuestro terruño El Salvador con fuerza y pasión!

Bibliografía: