Redación y fotografía- Melvin Artiga
Este día la Universidad Dr. José Matías Delgado lanzó el » Proyecto- U», donde asistieron representantes de diferentes colegios de nuestro país, con el objetivo de consolidar el acercamiento de la universidad con estas instituciones de educación media y generar experiencias de valor y aprendizaje mutuo.
En este lanzamiento el maestro Kevin Salazar Recinos Coordinador de la nueva licenciatura en Innovación y Transformación Digital de la ECC-UJMD, desarrolló la ponencia «Cómo Integrar el Pensamiento Digital en la Educación del Futuro».
Como primer punto el ponente hizo una reflexión sobre el papel que deben jugar los educadores en el contexto del siglo XXI, principalmente luego de la pandemia de la covid-19, donde los maestros deben asumir competencias para asumir la revolución industrial 4.0.
En un mundo cambiante, se necesitan educadores que se adapten y usen la cuarta revolución industrial como su herramienta de progreso, que inspiren e implanten en sus estudiantes la semilla de la curiosidad y el pensamiento crítico.
Ante este panorama, “el docente 4.0” debe ser capaz de moverse en los nuevos escenarios tales como: La personalización del aprendizaje, el aprendizaje híbrido, el diseño de nuevos espacios de aprendizaje y el uso de la big data, el internet de las cosas y la inteligencia artificial. “Debemos ser activadores del conocimiento”, comentó el licenciado Salazar.
Por otra parte, el coordinador enfatizó en la importancia de desarrollar habilidades cognitivas, ejecutivas y socioemocionales en los estudiantes, así como habilidades blandas y duras para los entornos semipresenciales, que cada vez prevalecen más en las universidades.
Este enfoque de aula invertida lleva consigo nuevas formas de evaluación, según mencionó el experto, como el aprendizaje dentro y fuera del aula, actividades basada en problemas, la experimentación, detectar necesidades del entorno y plantear y ejecutar soluciones reales.
El ponente concluyó su intervención recordando que, “nuestras palabras tienen poder” y que el docente tiene un alto grado de influencia en sus estudiantes, para motivarlos y propiciar diálogos efectivos entre educador-educando y practicando valores como la libertad y la democracia.
