Jaime Oriani, especialista en comunicación estratégica, sostiene que toda marca debe implementar tres grandes acciones en su comunicación interna: uno, implementar buenas prácticas de teletrabajo; dos, fortalecerla cultura empresarial; y tres, impulsar una comunicación interactiva y centrada en la persona
Por Tu Espacio
La crisis derivada del coronavirus ha supuesto (de forma obligada) un cambio de hábitos en muchos campos, entre ellos el laboral. El teletrabajo ha sido la forma en que muchos negocios y empresas han podido seguir manteniendo su actividad, pero lejos de ser algo pasajero, parece que esta modalidad ha llegado para quedarse. Sobre esta cuestión, la Escuela de Ciencias de la Comunicación (ECC), de la Universidad Dr. José Matías Delgado (UJMD), profundiza sobre la integración del teletrabajo en las visiones empresariales para consolidar una cultura empresarial. Por ello, Jaime Oriani, experto y académico de la ECC, comparte en el taller: «Claves para fortalecer la comunicación interna en tiempos de cambio» los elementos a tener en cuenta en la planificación estratégica de la comunicación organizacional.
La actividad se llevó a cabo el sábado 13 de marzo a través del programa de formación continua para estudiantes, docentes y graduados, Disruptivo. La disertación de Oriani se dividió en tres etapas: la primera, orientada a conocer acerca del alcance y la duración del contexto pandémico actual. Se señaló que este tipo de crisis ponen en riesgo el funcionamiento y la reputación de una organización ya que no se preveían los cambios que pueden traer consigo.
En la segunda etapa fue un espacio donde el docente expresó claves para hacer frente a los desafíos; se remarcó la importancia de implementar buenas prácticas para el trabajo, el fortalecer la cultura empresarial e impulsar la comunicación interna ya que esta tiene que crear entendimientos comunes que motiven un comportamiento en los colaboradores que ayuden a accionar y alcanzar los objetivos estratégicos de una empresa.
Y en la última fase, fue un espacio para proponer soluciones en conjunto a través de un modelo co-creado de Alejandro Formanchuk, experto en comunicación interna, el cual consta de tres pasos. En el primero llamado IMAP se realiza un diagnóstico con la selección de indicadores, metodología, análisis y presentación con el fin de monitorear lo que sucede con la empresa; en el segundo, se propone un plan creado en 6 dimensiones: operativa, estratégica, cultural, motivacional, positiva y feedback, orientado a las acciones más concretas a realizar para solventar las problemáticas. El último paso es la medición, a través de una técnica llamada AGOR que evalúa el área, la gestión, la opinión y los resultados.