El periodista de Teleprensa Canal 33 afirma que informarse debe ser una costumbre que todo estudiante de comunicaciones debe priorizar para actuar con rapidez en el campo laboral. Conoce la experiencia del graduado de la licenciatura en Ciencias de la Comunicación, de la Universidad Dr. José Matías Delgado
Por Krissia Menjívar
«Para Teleprensa Canal 33, Jorge Trillos», esas son las palabras con la que culmina el graduado de la Escuela de Ciencias de la Comunicación (ECC), de la Universidad Dr. José Matías Delgado (UJMD) en cada nota de televisión. Con 29 años y ocho años de experiencia como periodista televisivo, Kocky (como dice su usuario de Twitter) es uno de los rostros más conocidos de la pantalla chica a escala nacional. Tu Espacio conversó con el profesional para conocer sus inicios, experiencias y los retos de la televisón frente al auge de la Internet.
¿Por qué decidiste estudiar comunicaciones en la ECC?
Tengo dos tíos que son periodistas y siempre me llamó la atención lo que ellos hacían y pensé: si me gusta ¿por qué no hacerlo? La Matías fue la universidad con la opción que yo quería, pues vi la oferta académica de comunicaciones de otras universidades, pero el pensum de la Escuela de Ciencias de la Comunicación me convenció y así me decidí. Hice el curso de nuevo ingreso a la carrera y me gustó.
¿Cómo fueron tus inicios en la carrera del periodismo?
En el 2010, hice mis horas sociales en canal 10 en el área de producción. Ahí fue mi primer acercamiento con los medios de comunicación. Durante ese tiempo tenía el interés de pasarme al área de prensa, pero surgió la oportunidad de hacer prácticas en Teleprensa, canal 33. Un año después me contrataron, al inicio con un horario de medio tiempo, y meses después tiempo completo.
¿Cómo fue el contraste de aprender en la Universidad y trabajar en un medio real?
El periodismo conlleva situaciones que no son tan fáciles de predecir, situaciones que si no salís a la calle a practicar o si no sos participe de los eventos, es bien difícil que lo puedas aprender así por así. A pesar de tener las bases de la universidad hay cosas que las aprendes solo viviéndolas, no es solo saber redactar, conlleva muchas situaciones, saber preguntar, tocar ciertos temas que no sabes, arriesgarte por la situación de inseguridad en el país. Luego, te enfrentás a cómo tenés que redactar para cada formato, cómo tenés que escribir para televisión, cómo hablar con las imágenes; además de tener conocimientos básicos de postproducción, porque vos produces tu nota.
¿En tu época universitaria, hubo otra rama de la comunicación que te llamó la atención?
La verdad no mucho, quizá un poco la publicidad, pero no me sentía muy bueno en eso, tenía amigos que realmente destacaban en esa área; luego, quizá la comunicación institucional, me gusta, pero creo que desde el inicio yo tuve claro que quería ser periodista, estar en la calle, reportear, eso es lo mío.
¿Cuál son las características de un periodista que trabaja para televisión?
Es bien diferente trabajar para un periódico escrito, para televisión y para radio. En televisión, que es el campo que yo más conozco, hay varios factores que son importantes. El periodista de televisión es el que más pasa en la calle, porque el periodista de prensa puede hacer una llamada y con una llamada resuelve, igual el de radio. El de televisión necesita las imágenes, necesita sacar el audio, ambientes buenos, tiene que estar más en el campo.
El periodista de prensa escrita puede llamar a una fuente policial y le da toda la información necesaria, mandan a un fotoperiodista y toma la foto para la publicación. Para nosotros no es tan fácil, tenemos que ir a hacer imágenes, a conseguir fuentes que nos quieran dar declaraciones, porque eso es lo que la gente quiere ver en televisión. Independientemente el medio en el que trabaje el periodista se debe adaptar a los formatos y tipo de audiencia.
¿Cuáles son las principales habilidades que debe tener un periodista que trabaja en televisión?
Primero, debe ser una persona que le guste informarse. Un periodista debe saber de economía, de temas judiciales, políticos, debe saber tratar hechos de violencia, policiales, hechos naturales, en televisión trabajás casi de todo. Un estudiante de comunicaciones puede pensar ¿de qué me va a servir estudiar de economía? Luego, si querés trabajar como periodista te das cuenta que sí es necesario. Para casos que he tenido que cubrir me ha tocado estudiar la constitución, estudiar leyes penales, cosas que no me imaginé que me iban a servir, y sí te sirven después.
Luego, saber redactar, saber comunicarse, tenemos que tener una base sólida porque los jefes son exigentes y a parte que la competencia es ardua en este campo. Ahora tenés que redactar en área multimedia, en redes sociales, y la forma en la que se redacta es distinta porque es en el momento. Aquí vienen muchas personas (Teleprensa) a querer practicar o querer ser periodistas, y no saben cuántos diputados hay en la asamblea legislativa o no los conocen los nombres de los magistrados, los temas de actualidad, no saben quiénes son los ministros, diferentes cuestiones que son básicas y que como estudiantes a veces pensás que no te servirán en tu vida profesional.
¿Cuál ha sido una de las coberturas más difíciles que has hecho?
Quizá el primer homicidio al que fui solo con el camarógrafo, ya había ido a un par antes pero practicando y las escenas estaban lejos, siempre causa temor pero cuando fui yo solo la escena estaba bien cerca y era una persona que había recibido más de 10 balazos en el rostro.Creo que cada etapa tiene coberturas que te marcan, al inicio cuando me mandaron a entrevistar a un magistrado tenía inseguridad de qué temas hablar, a todos nos ha pasado y toca investigar.
Los comunicadores sabemos muy poco de leyes y después te das cuenta de eso, porque le prestamos muy poca atención a eso. Emocionalmente, también han existido coberturas muy difíciles. Yo tengo un hijo de un año y medio y una vez me tocó cubrir un accidente de tránsito en el que había muerto un niño, ver a los papás llorando me hizo sentir que esa realidad me podía pegar a mí, fue bastante difícil.
¿Cuál es la mejor parte de ser reportero?
Para mí es la aventura que vivís día a día, más en televisión; puedes amanecer desayunando en un hotel o en un restaurante en una conferencia, luego te toca cubrir una manifestación, luego vas a ver un muerto y terminás en otro hotel en una conferencia, con aire acondicionado y sentado. Es esa aventura que el día siguiente no sabés qué va a pasar, qué temas vas a trabajar, o por ejemplo, a dónde vas a ir, si a otro municipio. Creo que es un poco eso, la aventura, la emoción.
¿Cómo la era digital ha influido el qué hacer del periodista?
La tecnología ha cambiado todo. Cuando yo empecé se grababa en casete y con otras máquinas que era difícil utilizarlas, bien tedioso. Luego, cuando se sistematizó todo, se empezó a utilizar un sistema distinto, por supuesto que fue mucho más fácil. Ahora si tu camarógrafo no está vos podes grabar con tu teléfono, se pueden grabar audios e incluso hacer un en vivo con el teléfono que será transmitido en televisión, puedo mandar fotos, hacer entrevistas con el teléfono y puedo informar inmediatamente en las redes sociales, la tecnología lo ha cambiado casi todo.
Es más fácil que te puedan pasar información por tu teléfono, convocarte por mensaje, igual hay grupos por WhatsApp de periodistas, redes sociales en las que vos te informas, páginas de instituciones públicas que seguís. Antes tenías que estar llamando a la policía y otras fuentes constantemente.
¿Cuáles son los retos del periodista en el siglo XXI?
- Credibilidad: antes uno se paraba ante la cámara y la gente creía inmediatamente lo que decías porque salías en la tv, ahora no, tienes que ganar credibilidad, la gente no cree tan fácilmente lo que decís, lo cuestiona porque lo puede buscar en su teléfono, piensan, analizan y dicen no, esto no es así.
- Retroalimentación: la gente te puede ver en la televisión, te sigue en tus redes sociales y te puede preguntar o comentar algo en relación a la información que diste, a mí me ha pasado en mi twitter. Ahora las audiencias son activas y esperan que les contestes, esa es la retroalimentación que antes no existía, no se podía cuestionar de forma tan directa.
- Adaptarse a la tecnología: la gente ahora puede ver cinco o 10 minutos de noticias y te cambia, por eso los periodistas deben tener sus redes sociales que se convierten en canales de información para la gente y para otros periodistas, es algo que está evolucionando y seguirá así.
- Entender la línea editorial del medio: hace unas décadas los periodistas que informaban con tendencias políticas bien marcadas eran perseguidos, tenían que esconderse, no existía esa libertad ideológica; hoy sí sabemos de qué línea política son la mayoría de medios informativos, y está bien que exista esa libertad pero ahí el periodista debe escoger, conocer la filosofía del medio y analizar si es acorde a sus valores o ideas.
¿Qué podrías decirles a los estudiantes de la ECC que quieren ser periodistas de televisión?
Que se preparen mucho, que toquen puertas, que no se den por vencidos. Yo tuve que regalar mi trabajo un año. Este medio es muy competitivo, hay muchas críticas, hay que enfocarse y seguir trabajando en lo que a uno le gusta, y sobre todo prepararse.
A veces creemos que porque somos jóvenes y tenemos una cara bonita vamos a ser buenos periodistas. No, de repente puede ser que te escojan por tu imagen pero después te vas a dar cuenta que vas a durar poco o vas a tener que trabajar muy duro para conservar tu puesto.
Estar siempre a la vanguardia, informarse, leer todos los días el periódico, ver televisión, escuchar la radio, conocer sobre los temas que le interesan a la gente, rodearte de personas que te pueden sumar o ayudar, y tocar puertas, creo que eso es lo principal, atreverse.