
Redacción|María Fernanda Zeceña
El 5 de junio no es una fecha cualquiera. Es el día en que millones de personas, instituciones y gobiernos en todo el mundo detienen por un momento su rutina para mirar hacia un mismo horizonte: el cuidado del medio ambiente.
Este año, el Día Mundial del Medio Ambiente 2025 se celebra bajo el lema oficial “Poner fin a la contaminación por plásticos”, una campaña global liderada por el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) que hace un llamado urgente para transformar nuestra relación con este material, cuyo uso desmedido amenaza los ecosistemas, la salud y el futuro del planeta.
La República de Corea ha sido designada como país anfitrión, destacando su papel como referente mundial en políticas ambientales y soluciones tecnológicas sostenibles. Esta conmemoración no sólo recuerda la importancia de proteger nuestros recursos naturales, sino que busca acelerar la acción internacional hacia un tratado vinculante que regule la producción y gestión del plástico a nivel global.
Según datos del PNUMA, el mundo produce más de 430 millones de toneladas de plástico cada año, de las cuales dos tercios se convierten rápidamente en residuos. De ese total, al menos 23 millones de toneladas terminan en ríos, lagos y océanos. Esto genera efectos devastadores para la vida marina, la seguridad alimentaria y la salud humana: ya se han encontrado microplásticos en el agua potable, en el aire e incluso en el cuerpo humano.
En El Salvador, instituciones educativas, organizaciones ambientales y comunidades locales se han sumado a la jornada con actividades de concienciación, campañas de limpieza y talleres sobre reducción de plásticos. Algunas municipalidades están promoviendo ordenanzas para limitar el uso de empaques no biodegradables y fomentar alternativas sostenibles. El mensaje se multiplica desde las aulas hasta las playas: el plástico innecesario ya no tiene cabida en el futuro que queremos construir.
Como parte de la campaña 2025, Naciones Unidas ha producido un video informativo titulado “Día Mundial del Medio Ambiente 2025: Poner fin a la contaminación por plásticos”, que ilustra el impacto de esta crisis a nivel global y presenta ejemplos de soluciones en marcha.
Este 5 de junio nos recuerda que el cuidado del medio ambiente no puede seguir siendo una tarea secundaria. La contaminación por plásticos es un reflejo de nuestras decisiones cotidianas, pero también una oportunidad para corregir el rumbo. El planeta no necesita gestos simbólicos, necesita coherencia, voluntad y acciones sostenibles.