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¿Cuáles son los beneficios de los jardines flotantes para los ríos?

Foto con licencia ECC

Por Mariana Salazar

Uno de los beneficios más importantes de los jardines flotantes es su capacidad para mejorar la calidad del agua en los ríos. Las plantas acuáticas utilizadas en estas plataformas flotantes filtran y absorben contaminantes como nitratos, fosfatos y metales pesados, reduciendo la proliferación de algas y mejorando la claridad y la calidad del agua. Según la U.S. Environmental Protection Agency (EPA) (2024), “los jardines flotantes actúan como sistemas de biofiltración, removiendo nutrientes y contaminantes que de otro modo podrían contribuir a la eutrofización de los cuerpos de agua”.

Los jardines flotantes también desempeñan un papel crucial en la restauración de hábitats acuáticos. Estas estructuras proporcionan refugio y alimento para diversas especies de peces, aves y otros organismos acuáticos, lo que contribuye a la biodiversidad. Según el Global Water Partnership (s.f.), “los jardines flotantes ayudan a recrear hábitats acuáticos naturales, lo que favorece el aumento de la biodiversidad en ríos y lagos”.

Estos jardines se utilizan colocando plataformas flotantes, generalmente construidas con materiales reciclados o biodegradables, en ríos, lagos y otras masas de agua. Las plataformas están cubiertas con plantas acuáticas cuyas raíces crecen hacia abajo en el agua, absorbiendo contaminantes y proporcionando refugio para la vida acuática. Además, se han implementado en diversas áreas urbanas y rurales como una herramienta multifuncional para mejorar la calidad del agua, mitigar inundaciones y promover la biodiversidad. Por ejemplo, en el río Chicago, en Estados Unidos, estos jardines flotantes se han utilizado con éxito para limpiar el agua y revitalizar el ecosistema local. Según The Nature Conservancy (2020), “los jardines flotantes en el río Chicago han demostrado ser efectivos no solo en la limpieza del agua, sino también en la revitalización de especies nativas y en la mitigación de los efectos del cambio climático”.

@la.econstantino

¿Te imaginas un río limpio en tu ciudad? En Chicago, @urbanrivers está transformando el río con parques flotantes. Estos humedales artificiales utilizan plantas nativas para filtrar el agua y crear refugios para la vida silvestre. Han recuperado peces y mejillones de agua dulce, que filtran hasta 20L de agua por dia, mejorando la calidad del agua y aumentando la biodiversidad Además, estos jardines mejoran la calidad de vida de los ciudadanos, ofreciendo espacios de naturaleza, aulas abiertas y oportunidades para la ciencia ciudadana. Urban Rivers está limpiando el río y revitalizando la comunidad. ¿Te imaginas uno así en tu ciudad? Todos los videos del fondo son de la cuenta de @urbanrivers

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Otra ventaja significativa es la capacidad de los jardines flotantes para ayudar a controlar inundaciones y la erosión de las riberas de los ríos. Las raíces de las plantas estabilizan el suelo, reducen la velocidad del agua y disminuyen los efectos de las inundaciones. The Nature Conservancy (2018) menciona que “la implementación de jardines flotantes puede reducir significativamente la erosión de las orillas y ayudar a manejar mejor los flujos de agua durante las lluvias intensas”.

Los jardines flotantes también contribuyen a la reducción de los efectos del cambio climático al capturar dióxido de carbono y otros gases de efecto invernadero. Las plantas en estos jardines absorben CO2 durante la fotosíntesis, lo que ayuda a reducir la huella de carbono de las áreas urbanas. La International Union for Conservation of Nature (IUCN) (s.f.) subraya que “los jardines flotantes pueden ser una herramienta valiosa para las ciudades que buscan aumentar su capacidad de captura de carbono y mejorar la calidad del aire”.

Además de los beneficios ambientales, los jardines flotantes también tienen un impacto positivo en las comunidades locales. De acuerdo con el World Resources Institute (WRI), “los jardines flotantes no solo restauran ecosistemas, sino que también funcionan como plataformas educativas que promueven la participación comunitaria y la sensibilización sobre la conservación de los recursos hídricos”. Algunos proyectos de este tipo suelen involucrar a las comunidades en su diseño, construcción y mantenimiento, lo que fomenta la conciencia ambiental y el sentido de pertenencia.

Según la EPA (2024), estos jardines no solo embellecen los ríos, sino que también restauran la salud de los ecosistemas y fortalecen la relación de las comunidades con el medio ambiente. A medida que la crisis climática avanza, estas soluciones innovadoras se vuelven cada vez más importantes para la sostenibilidad del medio ambiente.

Referencias bibliográficas

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