La Amazonia es fuente de vida y de una riqueza ancestral de cientos de comunidades que está en peligro, debido a una deforestación rampante. Por ello, Pantone, Cafés Lavazza y We Are Social han creado un color que promueva la conservación del patrimonio forestal del pulmón del mundo
Por Fátima Segura / Agencias
Debido a los incendios que consumen al Amazonas, las organizaciones medioambientales están propiciando medidas que logren atender la emergencia ambiental sobre el pulmón del mundo. Esta es una preocupación es mundial, porque la deforestación de la selva tropical está causando la pérdida de fauna y flora más extensa de la tierra, que cuanta con 6.700.000 km2, la cual comparten nueve naciones: Brasil y Perú, quienes poseen mayor parte del territorio; seguido de Bolivia, Colombia, Venezuela, Ecuador, Guyana, Guyana Francesa y Surinam.
Te compartimos un video producido y publicado por: BBC NEWS, donde puedes conocer más por medio de este audiovisual de cómo la selva tropical se asfixia con el humo de los incendios. Además, hacemos énfasis que la administración del presidente brasileño Jair Bolsonaro, quien llegó a culpar a los ambientalistas de los incendios que han estado ocurriendo, para beneficiar a la economía. Ante estas declaraciones, algunos líderes del mundo están tomando acciones para intentar hacer conciencia y detener el suicido de la amazonas.
¿Por qué es importante la selva amazónica?
La existencia de la selva Amazónica es vital para los cambios climáticos, porque esta absorbe más de 1000 millones de toneladas de dióxido de carbono, fundamental para la existencia de los seres humanos. Además, en ella habitan alrededor de más de 30 mil tipos de plantas, por lo que posee la mayor diversidad biológica. En sus prados viven 2 mil 500 especies de peces, 500 tipos de mamíferos, 550 tipos de reptiles, 2.5 millones de insectos y mil 500 tipos de aves.
La pérdida de toda la biodiversidad que existe en el Amazonas, que crea humedad, podría llevar a reducir la lluvia a nivel global, lo que crearía sequía y aumentaría el calentamiento global, lo que generaría carencia en alimentos a nivel mundial, lo que provocaría el camino directo a la extinción de los seres humanos.
Según las estadísticas del Instituto Nacional de Investigaciones Espaciales (INPE), basadas en datos satelitales, donde muestran que, entre el 1 de enero y el 25 de agosto de 2019, se detectaron 80.626 focos de fuego activos, lo que representa un aumento de casi 80% comparado con el mismo periodo en 2018, siendo una cifra que no se alcanzaba desde 2010, cuando el total superó los 120.000. De los incendios en 2019, se estima que más de un 50% ha afectado a la Amazonia, sin embargo un 30% ha ocurrido en el bioma denominado Cerrado.
Ante estos datos alarmantes, existen asociaciones y compañías que están invirtiendo grandes esfuerzos para un bien común: salvar el Amazonas. Cabe mencionar, algunas de ellas son: la Fundación Lavazza, que se asoció con Pantone Color Institute y We Are Social, para poder aportar su apoyo y así generar pequeños cambios que se vuelven enormes, para crear un “COLOR ÚNICO”, que simbolice el tono tan peculiar que posee el Amazonas y fue bautizado como: «The Vanishing Color», o traducido al español como: el color de la desaparición.
Este proyecto está siendo llevado a cabo por CESVI, junto con el Ministerio de Medio Ambiente de Perú. La Fundación Lavazza se dedica a la protección del patrimonio ambiental de la selva amazónica, por la reforestación constante, al igual que las comunidades indígenas de la región: Madre de Dios de la región, que se encuentran en el centro de la selva amazónica.
El proyecto Lavazza para la Amazonia que lleva tres años, tiene dos objetivos principales:
- Promover la conservación del patrimonio forestal existente, a través de la protección directa por parte de las comunidades indígenas.
- Realizar reforestaciones en áreas degradadas del bosque con especial atención a la conservación y plantación de nogales amazónicos, un recurso ambiental muy preciado.
Los resultados obtenidos son
Repoblación forestal Comunidades locales e indígenas
Reforestación de 60 hectáreas, en áreas degradadas y con baja densidad de plantas de la Selva Amazónica Peruana, con nogales amazónicos impidiendo la dispersión de más de 4.000 toneladas de CO2 ya almacenadas por plantas existentes y capturando en 5 años, con plena madurez de las nuevas plantas, unas 1.200 toneladas más de CO2 Reforestación de 16 hectáreas.
Reforestación de 16 hectáreas, en áreas desertificadas, con sistemas agroforestales que alternan plantas de nogal amazónico, plataneras, copoazù y limones. Compra de un dron para facilitar el seguimiento e identificación de áreas enfocadas de reforestación
Fotografías que forman parte de las secuelas de los incendios en el pulmón del mundo
«La deforestación es la conversión de bosques a otro tipo de uso territorial o la reducción significativa a largo plazo de la cubierta forestal. Esto incluye la conversión del bosque natural a plantaciones de árboles, agricultura, pastizales, reservas de agua y áreas urbanas»
Smith y Schwartz (2015)